«Hola Mundo» es lo que primero se escribe cuando se inicia un nuevo blog o un nuevo perfil en una red social. Este «ReHola Mundo» tiene sentido en este momento por este reinicio tras una larga pausa de este lugar.
Desde el 4 de abril de 2020 al 21 de junio de 2020 me he dedicado a realizar un directo diario en mi decadente canal de Youtube. Y, por ello, me enfoqué en el contenido en esos vídeos, dejando de lado casi todo lo demás. Mi gran logro con ello ha sido perder 800 subscriptores del canal en estos tres meses. Pero qué genio que soy.
Para mí, seguir igual en Youtube, ahora mismo, es como seguir dándome golpes contra la misma pared. Carece de sentido. Pero, seguramente, en mi contrasentido, seguiré golpeándome contra ese muro virtual hasta que caiga. Porque Youtube ganará y yo perderé, de eso no hay duda.
Bueno, como se puede ver también, he sobrevivido al ataque del virus chino. Y este blog tiene pagado un nuevo año por delante gracias a sus financiadores. Así que, mi objetivo a partir de aquí es seguir llenándolo de contenido.
No sé que va a pasar, pero tengo claro que mis circunstancias están cambiando y no puedo repetir lo que ya he hecho. Seguro que se va a notar un giro de perspectiva. Veremos lo que se me ocurre.
De momento, este espacio sigue vivo y no necesita ninguna vacuna. El pasado queda atrás y no va a volver; el presente es lo único que importa porque nunca se sabe si va a haber un mañana. Carpe diem, como decían los romanos.
Reiniciándome, o como decían algo así en El Gatopardo: «Que todo cambie para que nada cambie.«