«Estraños tiempos son éstos en los que vivimos cuando a los viejos y a los jóvenes se les enseña falsedades en la escuela. Y a la persona que se atreve a contar la verdad se le llama de inmediato lunático y loco»
Platón (427 A.C.)
Los antiguos bien lo sabían.
¿Qué puede pensar alguien que esté en sus cabales de la policía de un estado cuando uno de sus sindicatos publica una imagen como la de aquí abajo?
Los detenidos del Govern de la República de Catalunya tachados como si todo fuera un juego de caza.
Un juego como…
Un lugar en el que hagas lo que hagas siempre acabas en la cárcel, ¿cómo se llama?
La respuesta sólo es errónea para las mentes programadas en el disparate.
Vamos, que no hace falta ni esforzarse en demostrar el autoritarismo porque esos cerebros vacíos están orgullosos de serlo.
La (in)justicia de la Dictadura de España ya ha emitido una Orden de Detención Europea a Bélgica para detener al President de la República, Carles Puigdemont, y el resto del Govern, y enviarlos a Madrid.
Si Bélgica acepta, los policías ya podrán tachar las imágenes de su tablero y casi acabar el juego.
Las élites españolistas se frotan las manos.
Pero cuidado, porque todavía estamos al principio: atención a las sorpresas.