Película imprescindible basada en hechos reales del gran Buster Keaton.
Tanta tecnología hoy, y con una cámara a manivela, en blanco y negro y sin sonido se pueden crear estas obras maravillosas.
El caso es que, a veces, los que manejamos las últimas tecnologías de nuestros tiempos nos podemos sentir aislados y desencajados de la sociedad que nos ha tocado.
Pero estamos convencidos de que lo que hacemos es lo correcto.
Y el paso del tiempo, casi siempre, nos acaba por dar la razón.
Antiguamente fue manejar una máquina de ferrocarril.
Hoy en día ser un maquinista de la General, por ejemplo, es conducir un canal de YouTube.
Creo que el paralelismo está claro.