Estando ayer con Luke Rudkowski, informador alternativo con base en Nueva York, le pregunté si había visto a alguien que informara en castellano desde la reunión Bilderberg.
Me dijo que no, que no había visto ninguno.
Le comenté la prácticamente inexistencia de informadores alternativos hispanos, y cómo tenemos que jugárnoslas sin medios y en la pobreza económica.
Me dijo que era necesario ser más profesional, supongo porque me vio grabando con mi móvil en mano.
Le respondí que tenía razón, pero que era como un círculo cerrado: sin dinero no se pueden obtener los medios para ser más profesional, y sin ser más profesional es casi imposible poder conseguir dinero.
Luego le pregunté sobre su forma de financiarse.
Me dijo que apenas recibe donaciones y que depende casi enteramente del dinero que consigue en youtube.
Claro, lleva más tiempo dedicándose a este oficio y tiene algo más de 150.000 subscriptores más que yo.
Aunque depender de una sóla fuente de ingresos es como caminar por un hilo.
Pese a ello, está claro que no me queda más remedio que persistir, continuar haciendo vídeos que interesen y subir en el número de subscriptores casi exponencialmente.
Pero, y hay un gran pero, mi gran problema es que los acontecimientos se precipiten y al final me quede en el camino.
Dará igual, porque sea como sea, alguien tendrá que haber que pueda cubrir este espacio de información alternativa en castellano que contrarreste a la propaganda oficial.
Ya digo, no nos queda más remedio, y si no soy yo pues que sea otro pero no puede ser que un idioma de 500 millones de personas no tenga un medio fuerte independiente y alternativo.